Tras la celebración la semana anterior del Campeonato de España en Cortes de Pallás, los campeones indiscutibles Cisco y Cristian tuvieron el gusto de celebrarlo el jueves en el club. Jorge y yo teníamos pensado ir el sábado a Benagéber pero tras las informaciones recibidas por nuestros corresponsales en la zona decidimos unirnos a Cisco y Cristian en una salida a Escalona.
Ese pequeño pantano siempre ha sido un escenario fetiche para mí por los recuerdos que me trae cuando empezábamos a pescar en barca. Con el paso de los años ves como hemos cambiado los métodos de pesca y poco tiene que ver como abordábamos un día de pesca hace 10 años o como lo hacemos ahora.
El día amanecía con niebla y el agua todavía caliente. En la rampa estaban ya Cisco y Cristian junto con Chimo de Navarrés que ya tenía el barco en el agua. En un embalse tan pequeño y sobrecargado de presión de pesca (estábamos el sábado 5 barcos y otros 5 o 6 patos) fuimos tirando de “puestets”. Empezamos pescando en superficie pero pronto nos dimos cuenta de que la actividad era nula. En un árbol separado conseguí el primer keeper del día, ya no hacíamos porra…
Seguimos por toda esa orilla sin tener ni picada. Parecía que ese día la cosa no estaría muy fácil. Decidimos cambiar de zona y con un crankbait saqué otro pez que rondaba el kilo. Junto a él iban otros 2 peces de buen tamaño pero conseguimos hacerles picar. Ya eran las 10 fuimos a buscar a los demás para almorzar tranquilamente. El almuerzo discurrió en animada charla donde los Champions nos desvelaron todos sus secretos de pesca en el campeonato de España. Según nos dijeron, salieron todos con cangrejo a Texas 😉
Después de almorzar buscamos una zona con árboles para ver si podíamos obtener más capturas. El patrón funcionó y salió algún otro pez mediano. Entramos hasta el fondo del todo y allí la cobertura espesa te hace pensar casi que estás en los Everglades. En un hueco de la cobertura clavé otro buen pez que partió el hilo.
Jorge se empezaba a poner nervioso porque la porra se cernía sobre su cabeza y eso es imperdonable para un pescador de élite 😉
A las 14:00 fuimos a comer sin prisa y casi a las 16:00 reemprendíamos la pesca. Volvimos a la zona donde habíamos visto peces y Jorge clavó uno bueno. Lástima que en el salto se desclavara.
Soplaba un aire que ya empezaba a rizar el agua y decidí coger la caña de paseante. Jorge me miraba con cara de desdén pensando “Este Javi no tiene ni puta idea”. Al segundo lance veo como un bass de más de kilo ataca el señuelo pero se pasó de frenada fallando la picada y saliendo por completo fuera del agua. Por suerte estos peces, a veces, repiten el ataque y a la segunda no falló. Bonita pelea y para afuera. En la misma zona aun tendría varias picadas más. Jorge salvó la honrilla con un pez que ya le quitaba algo de presión.
Volvimos a un último spot y aun conseguiríamos sacar varios peces más. A las 17:30 salimos del agua debido a la agenda y volvimos para casa. Fue un buen día de pescar en buena compañía dentro y fuera del agua.
